miércoles, 19 de marzo de 2014

"Aquí vives, Nunca te iras".... eso me han dicho

Es en la sangre que me duele
llorar tanto por una nube que
no deja de llover en mi cabeza.

Los días a veces se despejan
y el sol me ilumina calidamente.
Y en esos momentos soy feliz.

Pero siempre, siempre... esos momentos
llegan a su fin. No puedo evitar que el
clima cambie en mi vida. Que la noche
me diga "esto se terminó".

He rogado para que el tiempo se detenga,
para que la vida no vuelva a arrastrarme
a las sombras, al infierno de mi pasado
y mi todavía presente.

He pedido al cielo
una oportunidad.
He querido mas que nada en el mundo
tan solo irme y no volver mas.

Pero no, la casa siempre me abre
las puertas, y cuando entro, se vuelven
a cerrar. Siempre. No puedo parar
este trágico destino.

Estoy sufriendo,
mientras de a ratos tengo algo de felicidad.
Una felicidad absoluta, pero
que no logra ser eterna aun.

Y mis esfuerzos se rompen,
mis ganas son atadas por cadenas,
mas grandes que mis brazos.
Estoy cansado, pero quiero luchar aun.

No quiero terminar. 
No quiero decir "basta".
No puedo siquiera pensarlo.

¿Moriré en el mismo circulo vicioso?

Quiero Salir.
Quiero poder reír también.
Quiero tener el derecho que otros han tenido.
Quiero la libertad de mi familia.

Quiero morir cada vez que 
vuelvo a ver mi habitación... solo.

Quiero tan solo morir y desaparecer.

Solo me detiene de consagrar ese fin
la rosa que me espera en su jardín.
Porque es mi deber cuidarla y darle riego.
Es para todo lo que nací. Y es lo mas
maravilloso que jamas podría pedir.

Gracias por estar allí 

1 comentario: